¡Lo que Dice la Biblia Sobre la Música!
Nuestro dios
todo poderoso, era enaltecido y glorificado por sacerdotes con instrumentos como
trompetas, címbalos,
arpas, salterios y demás instrumentos
musicales.
También
a dios lo alababan con cánticos como:
Cantaban todos a una, para alabar y dar gracias a dios, y a medida que alzaban la voz con trompetas y címbalos y otros instrumentos de música, y alababan a dios, diciendo: Porque él es bueno, porque su misericordia es para siempre. (II Crónicas 5:13)
El rey David, consagraba al señor tu dios, con instrumentos
de música, que fueron hechos por el rey.
En los Salmos hay cánticos y alabanzas a dios, a dios se le
puede agradecer de esta manera, esto quiero decir que la música, siempre y
cuando sea honrada, no es mala, que la música no delate maldades, que no
corrompan los mandamientos y las leyes de dios, no habrá ningún problema.
El problema está en las canciones del nuevo género que
relatan es ira y pecado, la música satánica, música idolátrica, que lo que lleva es maldad en sus letras, eso es realmente
un pecado contra dios, porque todo los que salga de vuestros labios será
condenado:
Mas la lengua perversa será cortada. (Proverbios 10:32)
El impuro es enredado en la prevaricación de sus labios. (Proverbios 12:13)
El que guarda su boca guarda su alma. (Proverbios 13:3)
Las vanas palabras de los labios empobrecen. (Proverbios 14:23)
La muerte y la vida están en poder de la lengua. (Proverbios 18:22)
Las malas palabras de las canciones, son la condenación y
esclavitud del pecado, una canción puede ser muy alegre y no discrimina a
nadie, pero las de hoy en día expresan
mucha violencia, desobediencia, injusticia, maldad, rencor, odio de prójimo a prójimo. En si una
canción puede ser mala si la canta una persona en su alma expresa maldad y odio
hacia otras personas.
De los labios sale el pecado, como también puede salir amor,
paz, armonía, vida. Ciertamente la biblia nos enseña a que es bueno cantar con
fe, no hacerlo con rencor ni ira, ni mucho menos para ofender, insultar,
mendigar, irrespetar a alguien. Sabemos que a dios le adoraban con canticos,
pero estos fueron trascendiendo hasta con vértice en burlas al humano mismo.
Los cánticos en cultos, iglesias casas religiosas y demás son
de gran importancia para alabar al señor en ningún momento lo ofenden, siempre
y cuando sean cantos de veneración.